martes, 8 de septiembre de 2009

Palabras que pintan, palabras que invitan, palabras que suenan, palabras que vuelan


Las Hadas y el libro del Arco Iris


Había una vez dos hadas que vivían en el bosque de Palacel, ellas eran el hada del agua, vivía en un río transparente, lleno de peces y plantas acuáticas multicolores, y el hada de la primavera, que vivía en un bosque lleno de flores y mariposas rosas.
Un día el hada de la primavera cantaba su canción favorita y el hada del Agua regaba las flores y regalaba agua a los animalitos sedientos, de repente entre los arbustos vieron algo que brillaba, se acercaron lentamente y descubrieron que un libro luminoso las invitaba a abrirlo.
Al abrirlo miles y miles de estrellas salieron de sus hojas, convirtiéndose en pequeñas hadas que las invitaban al mundo mágico del Arco Iris, en ese momento todas las hadas vuelven a ser estrellitas y llevándolas en un vuelo lleno de cascabeles, regresan al libro mágico, mostrándoles un mundo maravilloso lleno de mariposas curiosas, flores de mil colores y pajaritos que bailaban con las ranas.
En este mágico mundo cada vez que el invierno llegaba, las hadas se convertían en estrellas y esperaban titilando en el cielo azul hasta que el Arco Iris de la primavera regresaba.
Cuando esto sucedía todo era alegría, diversión y fantasía.
Entonces las haditas del Arco Iris cuidaban animales y plantas, concedían deseos y abrazaban sueños.
Eran tan felices allí, que las haditas del Agua y la primavera decidieron quedarse un largo tiempo, esperando que alguien abriera el libro nuevamente y decidiera leerlo.
En ese momento volverían a su hogar para regalar alegrías, cumplir deseos coloridos y divertidos, y bailar con las flores bajo las estrellas, como lo hacían todos los mágicos días que pasaron con sus amigas en el Arco Iris.

Colorín colorado este cuento alevín ha terminado.


Cuento escrito, corregido e ilustrado por niños de 6 y 7 años, jugando a las hadas escribimos un cuento

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